En ocasió de l’Any Frederic Roda, Bellaterra.Cat comparteix l’article que el bellaterrenc Roda Pérez va publicar en castellà, al número 13 de la revista Espíritu, l’any 1955 (Pàgines 20 a 23)
LA CRISIS DE LA ECONOMIA LIBERAL
El distinguido Profesor, Dr. Román Perpiñá Grau, pronunció en abril de 1951, en la cátedra Ramiro de Maeztu del Instituto de Cultura Hispánica en la Facultad de Ciencias Politicas y Económicas de la Universidad de Madrid, varias conferencias que luego recopiló en una obra (1).
Es lo más notable de esta obra y lo que le da una acusada personalidad y relieve, el propósito de enfrentarse con el hecho liberal ecadémico con un método destinado a revelar las primeras causas del fenómeno, Estamos más que acostumbrados a ver tratada la economía como una simple técnica deshumanizada. Tanta es nuestra costumbre que un tratamiento distinto, tal como se da en el libro que comentamos se nos antoja, en una primera y precipitada impresión, como ensayismos, cuando, en realidad, tiene mucho más de Tratado o Discurso clásico.
De Hegel a Claudio Bernard el método dialéctico ha conocido todas las fases que median de la idolatría al desprecio. Pero es indudable que, a salvo todos los extremismos, no deja de ser un simétodo con valor propio y digno de ser tenido en cuenta en toda investigación, y más si ésta es de una ciencia cultural. Es más, el desmesurado desarrollo de la estadística y del empirismo en general en el campo de las ciencias económicas ha limitado las posibilidades de que fueran encuadradas en el campo más vasto y más propio de las ciencias sociales.
El Dr. Perpiñá comienza su obra dando a la palabra crisis un contenido especial justificado por consideraciones filológicas: según el autor toda crisis es el desenlace de una enfermedad propia. Es evidente que esta teoria discrepa de lo que podríamos lamar teoria institucional de la crisis en la que se da a éstas un cierto valor objetivo y singular. La crisis del liberalismo será, por tanto, el desenlace de una enfermedad llamada liberalismo.
Damos valor a esta idea inicial por cuanto tiene de sintomática en el original tratamiento que da el llustre autor a las cuestiones que va planteando a lo largo de la obra.
Justo es indicar que todos los conceptos, no obstante su intrir-seca orientación clásica, llevan un robusto contenido polémico muy capaz de airear los paradójicos dogmatismos liberales en los que vive inmersa nuestra civilización Las raíces del liberalismo se hallan, según el concepto admitido generalmente, en la teoría fisiocrática que introduce, por vez primera al ethos económico como el predominante en la estructura de los pueblos.
François Quesnay formula lo que el autor Ilama el gran sofisma
Ex natura jus, ordo et leges.
Ex homine arbitrium, regimen et coercitio
y cuyas consecuencias son incalculables en cuanto contrapone el corden de la naturaleza al desorden del hombre y fija asi el objetivo de la Norma retorno a la naturaleza y limitación a lo in prescindible de la ley dictada por el hombre. De aquel distico fecundo el Dr. Perpiña desprende, detalladamente, el programa liberal en todos los órdenes de ideas y actos: teologia, filosofia, ciencia, religión, moral, política, social, juridica, económica… y todo ello reducido a los dos mandamientos del liberalismo:
Sed libres y Buscad vuestro propio interés.
Dedica el autor la Parte II a un estudio de la manera especial como nace en Inglaterra el mundo liberal como cierta filosofia del individuo y la utilidad concepción que será la que ha de prevalecer en la órbita económica de la misma manera que la concepción francesa de naturaleza y libertad habla de des embocar en una concepción más puramente política y revoluciona ria. Entre Mandeville que realiza la crítica de los principios clásicos y Adam Smith que formula la nueva dogmática, se estructura la idea fundamental del ethos económico liberal, o sea la de que el cultivo del interés personal conduce, naturalmente, al logro del provecho público.
Es original la valoración especial que el autor da a Mandeville, titulado “Cabeza de serie” de la que han de proceder Helvetio. Montesquieu y Ronseau en el intento de restablecer las leyes de la naturaleza en el ámbito económico destruyendo “Ex homine arbitrium, regimen et coercitio”, o sea y en términos de realidad social, autoridad humana, monarquía y Dios, Iglesia.
Para lo liberal es inútil buscar ejemplo en filósofos sistemáticos: en su origen existen autores que expresen el especial ethos, de carácter societario y que son a un tiempo motor y conciencia de las nuevas concepciones que desembocan en descubrir al hombre aquellas leyes naturales conducentes al fin propuesto y reconocido como único en el obrar económico: la riqueza. No se persigue el bien, sino su medio: lo útil.
Estas leyes se formularán pronto y con extraordinaria claridad, tentadoras para las mentes ávídas de precisión y cientificismo:
(1) Román Perpiña Grau “La crisis de la Economia Literal” Ediciones Cultura Hispánica 1453-ESPIRITU (1355) 20-23.
BIOGRAFIA DE FREDERIC RODA PÉREZ Director teatral, crític i activista cívic.(Barcelona, 15 gener 1924-1 març 2006)
Fill de Frederic Roda i Ventura, estudià dret, i compaginà l’advocacia amb una intensa activitat cívica i cultural, que el portà a fundar CC (1954), grup nacionalista catòlic amb, entre altres, Jordi Pujol.
Fou, però, en l’àmbit teatral, que centrà les seves iniciatives, sobretot amb la fundació de l’Agrupació Dramàtica de Barcelona (1954), de la qual en fou el principal mentor, incorporant obres dels principals autors europeus. Com a director, hi estrenà Un caprici, d’A. de Musset (1957), La teta gallinaire, de F. Camprodon (1957), Antígona, de S. Espriu (1958), L’auca del senyor Esteve, de S. Rusiñol (1956), Homes i no, de M. de Pedrolo (1958), Les alegres casades de Windsor, de W. Shakespeare (1959), La cantant calba, d’E. Ionesco (1959), Un barret de palla d’Itàlia, d’E. Labiche (1960), L’hort dels cirerers, d’A. Txékhov (1960), Or i sal, de J. Brossa (1961), Tècnica de cambra, de M. de Pedrolo (1961), La visita de la vella dama, de F. Dürrenmatt (1962), entre d’altres, i L’òpera de tres rals (1963), de Bertolt Brecht, que ocasionà la suspensió governativa de l’entitat. Aquest mateix any promogué el premi Josep M. de Sagarra, per a obres teatrals inèdites, del jurat dels quals formà part, i començà a exercir la crítica teatral a Destino (1963-68) i, posteriorment, a La Vanguardia amb ressenyes que contribuïren a actualitzar els criteris d’aquesta activitat. De 1970 a 1980 fou sotsdirector de l’Institut del Teatre de Barcelona.
En un altre vessant, fou un destacat activista a favor de la pau: fou vicepresident de Pax Christi i, el 1984, amb el premi Nobel Adolfo Pérez Esquivel i Arcadi Oliveres fundà la Universitat Internacional per la Pau, amb seu a Sant Cugat del Vallès, de la qual fou director fins el 1999. L’any 2004 rebé de l’Ajuntament de Barcelona la medalla d’or al mèrit cultural. L’any 2014 l’Agrupació Dramàtica de Barcelona i l’Institut del Teatre de la Diputació de Barcelona, amb el suport d’Òmnium Cultural, crearen el el Premi Frederic Roda de teatre. El seu fill és Frederic Roda i Fàbregas
Font: Espíritu, Enciclopèdia Catalana,
BELLATERRA.CAT 